Madara is back

Soy un genio.

Mentira sos un puto!, con amor, yo!

Aquí mismo voy a hacer el post, no te creas jajaja

Mis pasos en el barro eran silenciados por la lluvia que se presentaba en aquel momento. Estaba empapado, mi poncho gris parecia negro, maltrecho y a causa de la lluvia aún más descuidado. Llevaba una especie de venda en la cabeza tapando mi ojo izquierdo. Todo mi ropaje estaba sucio y lleno de barro. Tenia una barba de quizás 2 o 3 meses. 

La guerra me habia llevado a vivir solo, sin contacto humano. Fui de las personas que más daño hizo por aquel entonces incluso a mi propia aldea. Me uní a quien no debia y perdimos. La alianza que formaron todas las aldeas fue mayor que nuestro poder. Perdí mucho y no solo la guerra contra mi propia gente. Sé que por mucho que camine, jamás encontrare un lugar donde empezar desde cero. 

Despues de un largo rato, en mitad de un llano en el bosque, encontré una cabaña de madera. Entre para refugiarme de la lluvia. Parecia abandonada pero en buen estado. Aun mojado, me senté contra la pared y cerré mis ojos intentando descansar un poco.

 
 
 
 

Me encuentro en Kirigakure, mi aldea natal. Desato el Hachibi y con una biju dama hago desaparecer media aldea. Fue rapido, segundos, pero esta vez puedo ver todas las caras de la gente que con horror miraba como destruia la aldea la persona que una vez la defendia. Pero algo me sacó de aquel sueño. Algo muy familiar *No...* pienso mientras siento mejor su presencia. Siento la cueva y sus alrededores *Nadie más...* reconocí su presencia, pero no su cuerpo. Me pongo de pie y me dirijo a la entrada. 

En la entrada de la cueva se escucha por ambas partes la tranquilidad de su interior y ahora la tormenta de fuera. Con un relampago, se deja ver mi silueta en la entrada de la cueva proyectando una sombra en la misma. Me dirijo directamente hacia aquel hombre -¿Que le pasó a Mizu?- Mi voz se notaba más aspera. Más cansada. Era una voz de una persona derrotada por el tiempo y las circunstancias. 

(Como ves, voy a hablar en guiones y voy a pensar en asteriscos que es un peo poner aquí los colores)

Esto es para que sepas cual es la voz de Reiku, pues jamas te la hice escuchar antes xDDD Empieza luego del segundo 20. Otra cosa que quiero aclarar es que en ningun momento Reiku se transforma en ella o da a conocer un cuerpo que no sea la del chico que esta enfrente tuyo, salvo por la cola, que es algo muy caracteristico de ella a la hora de molestarte xDDD 

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Efectivamente, no era Mizu. Tenia la esperanza de que mi habilidad fallara y no reconociera su cuerpo. Pero no, no era Mizu, era un hombre que portaba una mascara parecida a las de anbu *Reiku...*. ¿Como habria llegado a darse esta situación? ¿Donde está Mizu? Eran preguntas que volaban fugazmente por mi mente. La unica persona que me importo en Ame. Ante el comentario de los modales, miro hacia la mascara del chico, intentando penetrarla con la mirada con mi ojo derecho el cual aun se mostraba con mi iris negro -No he venido aquí para saludar. Solo quiero ver que Mizu este bien y me iré-. Sí, y me iré. No merecia una charla con ella, ni siquiera una mirada de la persona que intentó protegerme y luego abandone para posteriormente destruir lo que una vez fue nuestra aldea.

Sigo escuchando a Reiku y es evidente que intenta que me sienta mal por mi pasado -Reiku- Le digo con total seriedad. Queria que en mis palabras notara mi poder -Estoy siendo perseguido en todos los paises. Grupos enteros de shinobis se preparan durante años para emprender un viaje que ni siquiera saben si van a volver con tal de encontrarme y llevarme como prisionero y así ganar la inmensa recompensa que ofrecen por mi cabeza. Destrui casi todo Ame, con más de la mitad de la población...No intentes que me sienta mal por mi pasado porque no conseguiras nada-. Esperaba que le quedara claro, que ese juego no iba a servir conmigo o al menos eso creia porque al escuchar la voz de Mizu mi ojo derecho se abrió como un plato. Baje un momento la cabeza y al alzarla un aura morada me cubria todo el cuerpo. Ahora se podia ver el mangekyo sharingan eterno en mi ojo derecho -Reiku, no soy el mismo de antes. Conmigo no te conviene jugar. Suelta a Mizu o te saco de ese cuerpo y...Creeme, ahora puedo hacerlo sin dañar a nadie- Mi poncho roñoso se movia con el chakra morado que emanaba de mi. No merecia una charla, ni una mirada
 Pero si me pedia ayuda, es distinto.

 
 
 

Juego...Para mi no era un juego. Deje de verle la diversión a todo hace tiempo. Al parecer Reiku no temia luchar contra mi y ya que su cuerpo no era el de Mizu, a mi tampoco me daria miedo luchar contra ella. 

El calor aumentaba a causa de la enorme energia que desprendia Reiku. La verdad es que era amenazante así que antes si quiera de sentir mayor calor, una caja torácica hecha de huesos morados se formó a mi alrededor junto con el mismo aura de antes, protegiendome así de cualquier mal externo -Reiku, no sabes donde estás apunto de meterte- Respiro profundo durante un segundo. El aire filtrado por el susano me permitia hacerlo -No tengo nada que perder. No merezco nada de Mizu, pero...- Una oleada de chakra se desprendio de mi moviendo mi poncho y la ropa de la demonio -No voy a permitir que le hagas más daño- La mitad del cuerpo de Susano se alzó con un arco enorme y flechas -Mizu...- Dije en una voz más calmada y baja pero que aun se me podia escuchar -Siento todo el daño que te hice. A ti, a la aldea y al mundo shinobi. Nunca podré ser perdonado, pero si puedo enmendar algunos de mis errores. Y tú Reiku, eres uno de ellos- Lanzo una flecha de Susano hacia Reiku con una buena descarga de chakra. Sabia que eso no seria suficiente, pero aun no queria iniciar mi verdadero plan hasta ver sus habilidades.

Veo como la flecha del Susano se adentra en una espiral para desaparecer sin dejar rastro *Un jutsu espacio temporal...* No sentia el chakra de la flecha ni tampoco la habia sentido ir hacia ninguna parte -Mizu...- Dije con un tono de preocupación, ya que creia reconocer el chakra que habia utilizado para tal acto. El mangekyo sharingan se obtiene a través de una experiencia muy dolorosa e imaginar que Mizu lo tenia, me daba a entender que algo muy malo le pasó -Si, Reiku, quiero matarte. Pero no quiero lastimar más a Mizu así que ella decidirá que hacer contigo- Lanzo una bomba de humo frente a mi y al desvanecerse el humo, tengo en mis manos dos fuuma shuriken y varios shurikens colgados con hilos de los fuuma shurikens 

-Ya veo que tu tecnica puede hacer desaparecer cualquier objeto hecho de chakra, Reiku. ¿Pero puede hacerlo junto con armas y en varias direcciones?- Preparo la flecha del Susano para que desvie su mirada. Con suerte no se daria cuenta de que los shurikens pequeños tenian una carga de chakra raiton bastante poderosa como para electrocutar el suelo y partir levemente las costillas del susano que habia creado ya que se veia debil. Esa mascara no me permitia ver el mangekyo pero pronto descubriria si lo tiene o no -Mizu, prometo que mi intención no es lastimarte, aguanta- Dije aún creyendo que estaba en apuros -En mi siguiente movimiento terminará todo-

Lanzo los fuuma shuriken junto con los shurikens normales. Los dos grandes van al centro y los normales van en dos direcciones: los de la derecha hacia el suelo y los de la izquierda hacia el cuerpo pero evitando el posible kamui. Mientras, la flecha del susano se vuelve a disparar en la misma dirección que los fuuma shuriken *Si hace desaparecer la flecha, deberá fijar su mirada en la flecha y los fuuma shurikens* Quizas si hacia un susano más fuerte se podria librar de los otros shurikens, pero eso yo no lo sabia.


(Acción secreta)

 
 

Al momento de que Reiku sube, la flecha le pasa por abajo junto con los shurikens. Los dos grandes se transformaron en clones y estos a su vez se desvanecieron *Que suerte ha tenido...* Pienso al ver que mi estrategia no ha funcionado -Tsk- Me quejo con hastío. Noto como el ambiente se vuelve más caluroso aún. Realmente tendria problemas si no estuviera dentro de Susano. Observo brevemente a mi alrededor como los arboles comienzan a arder *Es una tecnica demasiado destructiva...¿Cuando permitiste esto Mizu?* Pensé. Mizu era la Raikage. Jamás hubiera usado un jutsu así en su aldea, no por los daños. 

Al ver como Reiku mueve la mano para que las flechas de fuego vengan hacia mi, Susano carga una flecha nuevamente. Mientas la carga, aparto la cinta que cubria mi ojo izquierdo. Al estar dentro de susano seria casi imperceptible. Se desvela así el Rinnegan. Miro al instante de quitarme la cinta a la mascara de Reiku e instantáneamente me cambio con la mascara, quedando ahora la mascara donde estaba yo antes. Mi mano hace contacto con la cara de Reiku igual que lo hacia la mascara. Queda paralizada ya que estoy agarrando el alma de la demonio -Es tu turno, Mizu. Si te alejas, el alma de Reiku queda en mi mano. Si te quedas, si no te mueves, entenderé lo que me quieres decir y la soltaré- Dije casi con dificultad. Le estaba hablando a Mizu, la unica persona que llegó a importarme de verdad y mi unica conexion con la vida en la que una vez fui feliz. 



El teletransporte y el agarre del alma es instantaneo, no hay evasión posible a menos que tuvieras el kamui activo, cosa que no me creeeeeria por mucho que digas jajajaja según tengo entendido como funciona esta tecnica, el humano queda paralizado ya que agarran su propia alma, aunque no queda fuera del cuerpo con el agarre. Basta conque tenga los dedos en la piel. Te puedes mover porque en tu cuerpo tienes otra alma, la de Mizu. Así que puedes rolear algo guapo ahora con los sentimientos de Mizu y su decisión

 
 
 

Por fin era Mizu. Por fin la voz que emanaba de sus labios era la de ella y no Reiku. Sabia que no merecia perdón. Mucha gente murió por mi culpa y parte de mi villa fue destruida. Entonces, ¿Por que me entristecio aquellas palabras? No esperaba un abrazo a nuestro reencuentro. Ni siquiera un "hola". Pero tampoco esperaba un "te odio". Quizás podia intuir los sentimientos de la Uchiha hacia mi. Pero quizás me dolió más despejar las dudas y escucharlo de ella con rabia.

-Mizu...yo- No pude articular más. La mano de Mizu habia atravesado mi estomago -¡¡¡Tsk!!!- Un quejido se escapó de mis labios a causa del dolor. La presión que creó el golpe en mi cuerpo hizo que escuchara un pitido dentro de mi. Mi mente se nublo a causa del golpe e incluso tosi un poco de sangre. La herida era seria, muy seria y podria morir en cuestión de minutos. Mi aura de chakra morado se desvaneció ya que perdí la concentración a causa del dolor. Por ello, noté como mi piel se iba calentando poco a poco a causa del ambiente que creó Reiku. Instintivamente solté el alma de la demonio y agarré el antebrazo de Mizu. Ya tenia su cola rodeando mi cintura, ni siquiera me habia dado cuenta de cuando pasó eso. El dolor era demasiado grande. Miré a Mizu a tiempo de ver como terminaba de decir algo que no siquiera escuché, ya que aún tenia el zumbido en los oídos. Intenté que en mi rostro no se notara el dolor que sentia, pero era imposible -Estupida...- Dije con rabia y apunté hacia su pecho con la palma de mi mano derecha. Todo mi cuerpo se tensó. En mi ser se podia notar la gran cantidad de chakra que iba a ser desprendida de mi -¡¡¡Shinra...- Mis ojos se desviaron de su pecho, a sus ojos. La miré por dos largos segundos. Mi rostro, que expresaba la rabia a causa del dolor se relajó *A ella no...* Mi mano derecha bajó. La mano izquierda, la cual sujetaba el antebrazo de Mizu se soltó hacia abajo, como si no me respondiera. Todo mi cuerpo se destensó y a su vez, mi mangekyo pasó a mostrar un ojo normal con la mirada perdida al igual que el rinnegan, el cual pasó a tener una sola pupila. Mis ojos se movieron para arriba y mis parpados se cerraron. Mi cabeza se fue hacia atrás y quedé suspendido en la cola de Mizu. Perdí el conocimiento. Preferí rendirme a luchar. No con ella.

 
 
 

-¿Donde está el kyubi?- Pregunté al Hokage, el cual se encontraba justo encima de su oficina. Negó con la cabeza -Bien, viejo. Pues lo encontraré por mi cuenta. Muere- Una rapida pasada de la espada de mi susano en forma perfecta fue suficiente para matar al Hogake y media aldea de Konoha. Pero al momento de que mi espada terminaba de dar el golpe, miles de voces a un volumen inhumano se dejaron oir, gritando, en mis oidos. 

Desperté abriendo mis ojos lo más rapido posible. Ya no estaba en aquella maldita guerra. Era un sueño *Solo era un sueño...*. Comprendí donde estaba inmediatamente sin tan siquiera mirar a mi alrededor y lo que habia pasado. No me mató. Levanté mi mano hasta colocarla encima de mi rostro y la miré. Miré la palma y el dorso como si aún no me creyera que estaba vivo. Me percate de que podia ver con los dos ojos. Bajé la cinta que tenia en la cabeza para taparme el rinnegan. Me incorporé poniendo los codos hacia atrás y me toqué el vientre *Nada* no tenia nada. Ni siquiera una cicatriz. 

Suspiré. Ni tan siquiera me habia dado cuenta del fuego ni de la presencia de Mizu hasta que los capte con la mirada *Se ha quedado cuidandome...* incluso vi el conejo. Comida...Hacia como tres días que no comia nada. Me incorporé para sentarme y flexionar mis rodillas. El lugar a pesar de la lluvia era calido, seguramente por la energia de Reiku. Junte mis manos -Mokuton- una pared de madera con una puerta tapó la entrada de la cueva para que no se escapara el calor -Así no se escapara el calor y...Ya no hace falta que lleves esa mascara- Dije mirando al suelo. Mis brazos estaban apoyados ahora en mis rodillas *¿Para que no se escape el calor? Soy gilipollas* pensé ante mi comentario ya que no sabia que decir. Desvie mi mirada hacia el conejo y luego hacia el suelo de nuevo -Dime...¿Por que no me has matado? Era tu oportunidad y Reiku hubiera estado encantada-

 

El calor de la cueva era agradable. Aunque aún queria encontrar un lugar al que llamar hogar y permanecer alejado de todos y no enfrentarme a mis demonios, mis pecados. En cuanto me dijo que comiera, me levante sin decir nada y con un kunai corté buena parte del conejo dejandole a ella menos de un cuarto. Obedecí sin pensarlo ¿Costumbre de mi anterior vida? Imposible, casi nunca le hacia caso. Entonces ¿Por que? Cambié mucho desde aquella epoca y ya no respondia ante nadie. Seria el hambre o ¿la echaba de menos?. 

-Bueno, entonces estamos empatados ya que yo tambien perdone la suya- me dio rabia el comentario y por eso contraataque -Aunque he preguntado porqué no me mataste tú- Dije tranquilo y con la boca llena de conejo y mirando al mismo -Me da igual que esté molesta. Ella no es quien me importa- Dije dejando caer que Mizu sí. Destruí todo con sangre y fuego. Lo unico que quedaba de aquel pasado en el que alguna vez fui feliz, era Mizu. Era lo unico representante de aquel pasado. Le di otro gran bocado al trozo que tenia de conejo -No sé si tienes un cargo ahora...Pero quizás no quieres que te vean conmigo. Estoy siendo buscado por todos los kages y por sus respectivos paises. Hasta donde yo sé, su maxima prioridad es encontrarme. Así que...Quizás deberias alejarte de mi lo antes posible- Tragué y di un suspiro -Se hace de noche- ¿Se quedaria conmigo? O ¿Se iria antes de que la noche de hiciera presente? De ahí mi comentario. Queria averiguarlo.

 
 
 

Observo a Mizu jugar con el fuego entre sus manos mientras sigo comiendo el conejo *Al menos se la ve relajada. De momento...* pensé mientras masticaba. Algunos trozos de conejo, aunque pequeños, eran visibles en mi barba. Lo que me daba un aspecto más descuidado aún. Hacia tiempo que no estaba con nadie en meses y me habia acostumbrado a la vida en solitario, por lo que no cuidaba ni mis modales ni mi aspecto fisico desde hace bastante tiempo. 

-No, no me basta con estar vivo. Me odias ¿Verdad? Lo dijiste. ¿Entonces por que no estoy muerto? ¿Que te frenó? Eso es lo que quiero saber. Aunque si no me lo quieres decir, pensaré lo que quiera- Digo aún con la boca casi llena. Veo como Mizu se levanta rapidamente y desprende una energia bastante poderosa *Sí, tú sí me importas* pensé mientras la seguia mirando. Al quitarse la mascara y quedarse muy cerca de mi, la miré fijamente aguantando la mirada y el hueso que tenia en mi boca y sobresalia de mis labios. Mi rostro denotaba seriedad, aunque la comida en la barba y el hueso en mi boca hacia que toda aquella seriedad se esfumara. Al alejarse, escupo el hueso hacia un lado con molestia *Comida y mentiras dice...tsk*.

De repente, al igual que Mizu, me percato de la presencia de un pequelo zorro de *¿nueve colas?*. Lo miro fijamente -¿Como coño ha entrado eso aquí?- alzo una ceja -¿Y ademas habla?- Al parecer, el zorro y no se que gente de un santuario tenian problemas *Mizu, ¿Que clase de vida has estado haciendo para acabar en un santuario?* miré hacia otro lado por si aquel zorro me podia reconocer. Ignore todo menos cuando escuché el nombre de aquel clan. Entonces mi mirada se clavó en el suelo, pensando, recordando. Me recorrian sentimientos de ira, miedo, incertidumbre, aunque no lo aparentaba. 

Cuando Mizu se dirige a mi directamente, solo hice caso a la pregunta, ni siquiera habia escuchado lo de las siete horas en la cueva con ella -¿Ah? ¿Que?- Aparte la mirada del suelo para dirigirla a ella. Ahora el zorro estaba entre sus brazos descansando *¿Que me he perdido?* suspiro un momento -No sé cuanto sabes tú. Pero yo sé que sea quienes sean, son muy poderosos. Quien me dio esto- Me señalo el ojo tapado por la cinta -Habló en varias ocasiones de ese clan. Les temia. Y quien me dio este poder, no era alguien que quisieras tener de enemigo. Solo sé que son muy poderosos y que son muy antiguos. Pero no sabia que aún están vivos- Activo mi sharingan y miro a Mizu -Despues de la guerra. Quise enmendar mis errores. Por eso queria encontrar al clan Ootsutsuki, ya que según lo que escuché, ese clan era demasiado peligroso. Solo encontré esto- Introduje a Mizu en un genjutsu donde le enseñaba un templo dentro de la cueva de una montaña. En él, me adentro y observo el simbolo del clan y cosas que no entiendo talladas en roca. Al terminar el genjutsu prosigo -Eso fue cerca de Kirigakure. Los aldeanos de un pueblo cercano a los que ayudé me hablaron del lugar. Pero no sé que es exactamente. Si te lo enseño es porque intuyo que tiene relación ya que el lugar era demasiado antiguo y se podian ver retazos de lo que alguna vez fueron figuras y escritos referentes al chakra- Hago una pausa -Mizu, si ese clan sigue en activo, creo que el mundo corre verdadero peligro-

 
 



PD esta será la forma de Ginji en su transformacion "adulta"

Veo como Mizu sale de la cueva despues de decirme aquello. Estaba claro que si ella me necesitaba, iba a ayudarla y más si se trataba de aquel clan. Me quedé mirando fijamente el suelo durante unos instantes, perdido en mis pensamientos *¿Un miembro del clan, por el templo que menciona Mizu? Puede ser que este buscando uno de esos templos que yo encontre. Pero...¿Por que?* ¿Quien era yo para preocuparme? ¿Quien era yo para salvar la vida de todos esos niños? Si seguramente yo mate a las madres y padres de algunos de ellos *Quizas aparezco en sus pesadillas o yo soy la propia pesadilla de esos niños* Apreté el puño *¿Merecen mi ayuda? Seguro que muchos de ellos preferirian morir a ser ayudados por mi...Pero, no puedo ignorar la petición de Mizu* Suspire y me levanté. Me sacudo el polvo de mi ruinoso poncho y me dirigí a la salida de la cueva.

Al abrir la puerta de madera el sol golpeo en mi rostro. Era un sol debil de la mañana, por ello la luz no molestaba. Ni siquiera calentaba aún. Se podia respirar una mezcla de aire fresco y limpio a causa de la lluvia, con olor a quemado de la pelea con Reiku. Instintivamente me llevo la mano donde Mizu me golpeo. La busco con la mirada y me dirijo hacia ella -Te ayudare. Pero quizás deberias dejarme esa mascara a mi. Recuerda que me buscan por ser el peor criminal con vida. Creo que a ninguno de los dos nos conviene que me reconozcan. No quiero que la gente del templo te juzgue por ir acompañada de Sasuke- Le digo mirando al horizonte -Por cierto...- Hice una pausa creyendo que conocia la respuesta -Puedo hacer que lleguemos allí ya mismo. Pero antes necesito que me lo enseñes a traves de un genjutsu. Sé que te preocupa que sepa donde está el templo, pero ahora mismo hay un mal mayor. Lo dejo a tu elección. Ademas...Una vez que este allí, podre volver de nuevo cuando quiera- Sigo mirando al horizonte sin saber muy bien que decir o hacer. Con un jutsu espacio-temporal podia hacer que llegaramos en menos de 10 segundos. Pero mucho me temia que Mizu no iba ha aceptar.

 
 
 

Contra todo lo que yo pensaba, Mizu aceptó en que yo usara el jutsu -De acuerdo- en un momento, aquel pequeño zorro me mostró donde estaba el lugar. Era un templo bien oculto *¿Que historia tiene Mizu con este lugar?* pensé mientras veia el sitio gracias al animal. Cuando el zorro retiró sus patas de mi frente, hice la banda que cubria mi ojo a un lado revelando de nuevo el rinnegan. En este empezaron a aparecer más pupilas y centre mi mirada en un punto en el aire visualizando aquel templo. En menos de un segundo se abre un portal de color morado y circular -Está listo-. 

Despues de pasar por el, en un instante nos encontrabamos en el gran patio del templo. Percibía mucha gente. Adultos y niños, más niños que adultos *¿Que es este lugar?* niños y mayores se acercaron a Mizu, aunque algunos de quedaron atrás en cuanto me vieron. Me reconocieron en seguida. Baje un poco más mi cinta que cubria el ojo. No me cubria más la cara, ni siquiera cubria más el ojo. Fue un reflejo y no sabia si de verguenza o culpabilidad. Mientras tanto Mizu era rodeada de niños que la llamaban al nombre de Haku *¿Haku?* ¿Acaso no sabian su verdadera identidad? ¿Por que ocultarla? Miré a Mizu desde atrás con dudas. De repente desperte de mis pensamientos al ver a Mizu caminar y sin pensar mucho más la seguí. Pero no caminó demasiado cuando me presentó a los demas y que estaba de visita. Asentí con la cabeza, habia entendido a la perfección el mensaje. Miré tanto a niños, como a adultos para posteriormente inclinar el cuerpo hacia adelante en señal de respeto y agradecimiento por dejarme estar allí. No dije nada. No queria decir nada. 

 Pronto entramos en una habitación que parecia estar protegida con sellos, aunque no reconocia su utilidad. Tomé asiento tal y como dijo Mizu. Al sentarme, el peso de mi cuerpo hizo que la arena y el polvo de mi ropa sonara en la silla. Fue un sonido sucio. Hacia bastante que no limpiaba mi ropa. La arena y suicidad de la cueva con un centenar de lugares más en los que habia dormido, se concentraban en mis ropajes. Mizu extendió varios pergaminos en la mesa. Reconocia algunas zonas pero otras no. Me iba a informar sobre como estaban las cosas -Entendido-. 

Dos zorros hicieron acto de presencia y tras ellos, la habitación quedó sellada. Dijeron que los miembros del clan andan buscando los bijuus y los pergaminos *"Los", así que hay más de uno* y que tambien buscaban a Mizu *¿a Mizu? ¿Por que? Si hay más de uno seguramente estamos en problemas* Pensé mientras la miraba a ella. De repente Mizu se quitó la mascara delante de todos y me hizo una pregunta que me hizo sentirme tremendamente estupido *Nunca...Nunca lo habia pensado* Mis ojos se apartaron de los de ella para clavarlos en la mesa *No, no tengo ni idea. ¿por que nunca me lo pregunté?* miré a Mizu -No, nunca. ¿Que pasa con eso?-